Agua y economía circular

Los retos actuales del agua requieren que todos los usuarios diagnostiquen, debatan y desarrollen soluciones compartidas, incluyendo el sector privado. Como usuarios del agua, como productores de aguas residuales, como proveedores de servicios, financiadores o aseguradores, las entidades del sector privado influyen enormemente en la disponibilidad del agua y en cómo se abordan los riesgos y oportunidades relacionados con el agua.

A lo largo de los últimos años, GWP ha acumulado experiencia en el trabajo con el sector privado, desde las tres áreas de anclaje de GWP (resiliencia climática, Objetivos de Desarrollo Sostenible y cooperación hídrica transfronteriza) en la Estrategia 2020-2025 de GWP. Este plan se compromete a movilizar el compromiso del sector privado, hacia la Gestión Integrada de los Recursos Hídricos (GIRH).

La experiencia de GWP Sudamérica

GWP Sudamérica concreta su relacionamiento con el sector privado a través de su proyecto “Buenas Prácticas Azules”.

Este proyecto busca desarrollar experiencias de medición de consumo de agua en empresas, formular recomendaciones para mejorar la eficiencia en el uso del agua en sus procesos productivos, las acciones de sostenibilidad en el sector industrial y promover la economía circular. 

El modelo circular de desarrollo económico se basa en tres principios:

-        Eliminar los residuos y la contaminación

-        Circular los productos y materiales

-        Regenerar la naturaleza

Este modelo contempla los impactos en el clima y la biodiversidad. Entre otros aspectos, para lograr un modelo de economía circular se necesitan condiciones económicas que permitan amplificar las experiencias a gran escala, y una gran red de actores involucrados con esta visión.

El antecedente de Buenas Prácticas Azules es el “Programa Certificado Azul” de la Autoridad Nacional del Agua (ANA) del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego de Perú. La experiencia en Uruguay se realiza en colaboración con la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU).